¿Como es tu Relación profesional/cliente? ¿Es un regalo divino o una Pesadilla Infernal?
De esto justo nos va a hablar hoy mi querida Ana Tovar, Coach de desarrollo profesional, que tiene la suerte de dedicarse a ayudar a que las personas le den más sentido a su vida dedicándose a su verdadera pasión. ¡Ahí es na!
Una persona excepcional, de enorme corazón y de una dulzura extrema, que hoy nos hace el regalo de contarnos su visión de la relación con nuestro cliente.
Ana, estas en tu casa, pasa sin llamar.
¡Hola a todos!
Soy Ana Tovar y estoy aquí por cortesía de mi amigo Paco.
Hoy no estoy aquí para hablaros de coaching ni de desarrollo profesional, por lo menos directamente.
La verdad es que quería escribir sobre un tema que realmente fuese de interés para vosotros, lectores de Esto es un no parar.
Después de darle muchas vueltas, no encontraba un tema genuino, así que lo hablé con Paco, y como no, enseguida me dio la idea.
Me dijo que estaría genial que hablase sobre la relación entre profesional y cliente, y que lo hiciese desde mi experiencia personal.
Enseguida conecté con el tema, porque no está tan manido como otros.
Así que ya os adelanto, que desde mi visión, mis relaciones con mis clientes se acercan más a un regalo que a una pesadilla…
Pero vamos por partes.
Hay muchos tipos de relaciones profesionales, desde la que surge cuando compras un producto en una e-commerce, hasta la relación que tienes con la panadería de tu barrio.
Yo me voy a centrar en una relación donde hay un profesional que ofrece un servicio, y por lo tanto, hay un período de tiempo concreto donde se produce un trabajo conjunto.
Relaciones tóxicas
Lo que sé de las relaciones tóxicas entre profesionales y clientes, lo sé por lo que algunos de mis clientes y compañeros emprendedores me cuentan.
Son personas diferentes con empresas diferentes, pero sufren las mismas situaciones con sus clientes:
- No pagan puntualmente (o nunca)
- Les marean porque no saben lo que quieren realmente
- Juegan al despiste para sacar provecho de cosas que no están incluidas en el acuerdo
- No se comprometen a entregar su parte de trabajo a tiempo
- Tienen una actitud demasiado exigente y altiva.
Todo esto produce mucha insatisfacción. El trabajo que tanto te gusta se convierte en difícil, poco motivador y seguramente te robe mucha energía.
Si tu inteligencia emocional no es suficientemente alta, seguramente también te robe tiempo, porque estarás pensando en ello cuando no estés trabajando.
A parte de eso, si somos honestos, seguramente el trabajo final no tenga tanta calidad como cuando trabajas a gusto.
Si alguna de estas situaciones te ocurre de forma puntual, no me preocuparía. Hay de todo en la Madre Tierra… y siempre será una experiencia más de la que aprender y sacar su lado positivo.
La cuestión es si este perfil de cliente y de situaciones se suele repetir. Ahí tampoco me preocuparía, pero sí me ocuparía en saber cuál es mi parte de responsabilidad.
Cosas que puedes hacer para mejorar la relación con tus clientes:
- Definir a tu cliente ideal: Si te ocupas de averiguar con qué tipo de personas quieres trabajar, quiénes son, cómo son, cuáles son sus necesidades, etc., podrás centrarte en atraer a más clientes con este perfil.
- Redactar e interiorizar un protocolo de actuación: Piensa en todos los pasos que tienes que dar desde el primer contacto de la relación hasta el final. Cuida los detalles e intenta prever todas las variantes.¿Cómo quieres que sea la acogida? ¿y el final de la relación? ¿firmaréis un acuerdo o contrato por escrito? ¿cómo actuarías en caso de…?
- Revisar tu actitud: Cuando surge un conflicto es muy común echarle la culpa al otro, pero a veces, el problema parte del profesional. Considero que hay que preguntarse si se ha sido asertivo, amable y coherente. No vale con elaborar un discurso súper educado y que tu cara y actitud sean prepotentes. En serio, no me hables de usted pero sonríeme.
Otra revisión importante, es la de comprobar cómo te comportas tú cuando eres el cliente. Más tarde o más temprano, la vida te trata como tú la tratas.
Y se te presentarán situaciones difíciles hasta que hayas aprendido la lección que la vida quiere enseñarte.
Regalo divino
Ahora toca hablaros del regalo que supone trabajar con tu perfil de cliente ideal.
Aunque yo nunca he tenido problemas como los que he mencionado, sí he tenido que finalizar algunos procesos de coaching con clientes.
Uno de ellos fue porque mis valores personales estaban enfrentados a los de mi cliente, y por lo tanto, me era fácil juzgarle, algo prohibido para un coach.
Los otros dos, fueron por falta de compromiso.
A pesar de que es muy difícil decirle a tu cliente que la relación debe acabarse, y los motivos, tampoco tuve conflictos.
Es cierto que esas conversaciones fueron complicadas, pero gracias a hacerlo con asertividad, estos tres clientes son personas que todavía, a día de hoy me aprecian.
Más que clientes
Con el resto de clientes, trabajar supone un regalo, tanto por lo que aprendo de ellos, como por la energía tan especial que se genera.
Con muchos de ellos, surge una amistad. Para muchos, esto no es profesional, para mí, es lo mejor de mi trabajo.
El hecho de que sean mi perfil de cliente ideal, hace que conecte con ellos a un nivel también personal. Son personas con una valentía, valores y mentalidad, que quiero tener en mi vida.
De hecho, no tengo relaciones más estrechas con ellos, porque viven por todas partes de España. Aún así, en algunos casos la distancia no importa porque la conexión ya se ha creado.
Formar parte de la vida de mis clientes, después del proceso de coaching es un regalo, porque puedo seguir siendo testigo de los logros que van alcanzando. Clic para tuitearSoy consciente de que esto también me pasa por la naturaleza de mi trabajo. Evidentemente si diseñas webs, no creo que sea tan fácil llegar a conectar tanto.
En resumen
La cuestión aquí es que sí sea fácil trabajar con tus clientes, y además enriquecedor y motivador. Esto sí que lo puede conseguir cualquiera y te animo a que te enfoques en ello, porque sí que es posible.
Olvídate de las malas experiencias y cambia tu patrón de conducta para que también pueda cambiar el patrón de tus relaciones.
Y hasta aquí el artículo de Ana ¿Que te ha parecido? Déjanos un comentario y nos cuentas.
Si quieres conocer más de ella (cosa que te aconsejo) visita su web anatovar.com
allí podrás saber más de su trabajo y contratar sus servicios como Coach.
Y sin más me despido por hoy imparable. ¡Nos leemos mañana!
Si es que Ana es una crack como profesional y como persona. Son de esas personas con las que no te cuesta conectar y abrirte y además siempre te aporta algo.
Un abrazo Ana.
Mil gracias, Paco y Equipazo, por cederme este espacio tan chulo y tratarme tan bien.
Así da gusto…
Es la más de las mases jejejej. Un placer cariño. Ya sabes que esta es tu casa.